Jóvenes solidarios: juntan alimentos y venden empanadas para ayudar a un comedor que atiende a 40 niños

Jóvenes por el Bien Común lanzó la campaña “alimentando juntos” para ayudar a un comedor en el barrio Las Margaritas en San Rafael. Reciben donaciones de alimentos pero además venden empanadas para juntar fondos y hacer una compra al por mayor. Los detalles y como contactarlos.

Jóvenes solidarios: juntan alimentos y venden empanadas para ayudar a un comedor que atiende a 40 niños
Los integrantes de Jóvenes por el Bien Común siempre atentos a colaborar con los que más lo necesitan.

Los Jóvenes por bien Común iniciaron una nueva campaña solidaria “alimentando juntos” con el propósito de colaborar con el merendero Unidos por los Niños.

El nuevo comedor emplazado en el callejón Guajardo y Las Américas en el barrio Las Margaritas en San Rafael, atiende a unos 40 niños desde 1 años a 14 años.

Entre las necesidades que constataron los integrantes de la organización o gubernamental está el de ropa pero la urgencia es juntar alimentos.

Decidimos ayudar a este merendero porque es nuevo y tiene muchas necesidades, principalmente de alimentos”, comentó Ludmila Merino, integrante de Jóvenes por el Bien Común.

Para colaborar los miembros de JBC idearon dos mecanismos, por un lado reciben donaciones y para ello colocaron cajas en algunos comercios sanrafaelinos en los que los vecinos pueden dejar un alimento como así también, contactándose con alguno de los integrantes “no tenemos problemas en ir a retirarlos”, agregó la joven.

Los integrantes de Jóvenes por el Bien Común siempre atentos a colaborar con los que más lo necesitan.
Los integrantes de Jóvenes por el Bien Común siempre atentos a colaborar con los que más lo necesitan.

Pero además de recibir donaciones este fin de semana harán una gran venta de empanadas en el que la docena tendrá un costo de $600 y todo lo que logren recaudar será para hacer una compra al por mayor para el merendero.

“Seguimos recibiendo donaciones pero también decidimos hacer una venta de empanadas. Este viernes vamos a preparar todo y el sábado (16 de julio) se hará la venta”, detalló Ludmila.

“La idea es juntar algo de dinero y hacer una compra grande de mercadería para el comedor”, insistió.

Jóvenes por el Bien Común nació poco antes de la crisis del coronavirus y lo que inició entre un pequeño grupo de amigos fue extendiéndose de boca en boca y hoy la entidad cuenta con una treintena de integrantes que los mueve una sola causa “hacer el bien sin mirar a quien” como reza el slogan que los acompaña.

Empezamos siendo dos o tres amigos y hoy somos unos 30, todos jóvenes de distintos ámbitos que lo único que pretendemos es ayudar a los demás”, dijo Merino.

Donaciones de alimentos

Para facilitar las donaciones de alimentos, los vecinos pueden dejar su colaboración en las cajas que están en los siguientes comercios sanrafaelinos: San Lorenzo 15 (librería), un supermercado en Santa Fe y República de Siria y otro en Ortiz de Rosas y Balcarce.

Además hay una caja receptoras en la panchería emplazada en Bernardo de Irigoyen 119, un minimarket en Rivadavia 809, autoservicio de Mitre y Córdoba, en la panadería en Rivadavia 870 y también en la gomería ubicada en Adolfo Calle y Espasandín.

Los integrantes de Jóvenes por el Bien Común siempre atentos a colaborar con los que más lo necesitan.
Los integrantes de Jóvenes por el Bien Común siempre atentos a colaborar con los que más lo necesitan.

También está la posibilidad de ubicar a los integrantes de Bien Común en las cuentas oficiales de redes sociales. En Instagram los encuentran en JBC.Oficial o en Facebook en Jóvenes por el Bien Común

Además pueden llamar por teléfono a 2604-312903 (Ludmila), 2604-617784 (Sofía) o 2604-238157 (Julen).

Si no pueden llevar la mercadería nos avisan y la vamos a buscar”, insistió Ludmila Merino.

Venta de empañadas

La venta de empanadas será este fin de semana. Los interesados pueden llamar y encargarlas y el sábado al mediodía la tendrán en casa.

“Empezamos por empanadas y después también tenemos previsto hacer una venta de tortasfritas”, dijo entusiasmada Ludmila.