En lo que comenzó como un confuso hecho, terminó con un procedimiento policial por tenencia ilegal de armas de fuego. Personal de la unidad investigativa de Malargüe secuestro de un arsenal y más de 25.000 municiones, la mayoría calibre 22.
Los sucesos que desembocaron en los allanamientos a cargo de la División Investigaciones comenzaron en la ruta 40 norte cuando una camioneta se estacionó a metros de un control de Gendarmería.
Los viajeros empezaron a ir y venir cerca de los gendarmes hasta que uno de los efectivos reconoció a un vecino, era el propietario de una armería, entonces se aproximaron hasta el vehículo y encontraron un bolso con armas y municiones y según fuentes policiales "no estaba todo en regla".
A partir de ese incidente la justicia ordenó dos allanamiento y 1 registro domiciliario y secuestraron 41 armas entre las que se encontraba 7 revólveres, 8 pistolas, 19 carabinas, 3 rifles y 4 escopetas.
Además se llevaron más de 24.000 municiones calibre 22, 100 calibre 36, otras 1.000 calibre 32 y varias más de distinto calibre.
En cuanto al propietario del negocio lo trasladaron a la Comisaría 24 de Malargüe.
Junto a los efectivos de la Policía intervino agentes del REPAR que viajaron desde San Rafael.