"La tenencia responsable no es sólo dar una atención veterinaria, sino también resguardar al animal y al ciudadano porque es un tema de salud pública una mordedura o la materia fecal en la calle", indicó el Dr. Gastón Canevaro, director de Control Sanitario de la Municipalidad.
En diálogo con El Norte, sostuvo que unos 1400 animales –entre gatos y perros- fueron castrados durante este año, con la consecuente aplicación de la vacuna antirrábica.
Cabe recordar que San Nicolás resultó una de las zonas más afectadas por los ataques de murciélagos, y se constató la presencia del virus en al menos dos perros de un barrio privado. "La sociedad debe tener el compromiso de no dejar al animal suelto porque puede morder y contagiar, causar accidentes o romper las bolsas de residuo", puntualizó Canevaro.
En el Centro de Medicina Preventiva (CEMPRE) se denuncian por mes entre 25 y 30 casos de mordeduras, en gran medida por perros con propietario. Se pueden distinguir tres franjas etáreas: menores de cinco años, nenes en edad escolar y adultos, atacados mayormente cuando circulan en moto o bicicleta.
“Mucha gente trae acá sus mascotas, pero también vienen voluntarios que colaboran con nosotros acercando a los animales de riesgo para esterilización, vacunación y registro. Todos salen con un tatuaje indeleble en la oreja derecha”, remarcó, identificando incluso la zona de procedencia.
Se estima que hay un perro por cada cuatro habitantes, y uno de cada ocho sería callejero.