Tras presenciar un hecho de robo, los vecinos de calle Quiroga y Alvear decidieron intervenir y salieron a buscar al ladrón, que minutos antes le había arrebatado el celular a una joven que caminaba por la vereda.
El malviviente, de 28 años, iba a bordo de una bicicleta, pero eso no impidió que fuera abordado por los transeúntes, que lo redujeron hasta esperar la llegada del móvil policial. El teléfono fue restituido a su dueña.
La adolescente, de 17 años, no sufrió heridas más allá del susto y la conmoción por el hurto. En su poder el malhechor portaba un alambre de aluminio y un arma blanca. El caso quedó en manos de la UFI Nº 6.