El jueves pasado, la agrupación Juvennat expresó su preocupación por la “destrucción” del arroyo Piedra Blanca en la banca del vecino del Concejo Deliberante de Merlo.
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Mario Nicoletti, uno de los principales expositores, planteó que se trata de “un problema de vieja data”, ya que el primer reclamo se realizó en 1996. El problema es la sobre explotación de áridos en la zona del arroyo.
Por ello, integrantes de la agrupación solicitaron una “emergencia ambiental” en el cauce y el establecimiento de una veda parcial para que no se siga destruyendo ese espacio natural.
Según Nicoletti, se estarían obviando leyes provinciales y ordenanzas, pero entiende que “detener la extracción es detener la economía” y que la situación debe cambiar.
Los ediles presentes se hicieron eco del reclamo y aclararon que este viernes arribaba el área de Minería de la provincia a evaluar la situación en conjunto con el municipio.
La concejala Morandé coincidió con el planteo y comentó: “El municipio tiene su parte de responsabilidad porque cobra las tasas y el Concejo Deliberante que tiene ordenanzas que prohíben la extracción de áridos”. “La situación se ha ido de control”, añadió.
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