El viernes alrededor de las 20:45 en la panadería La Milonguita, ubicada en calle Bolívar a metros de San Martín, pleno centro de la capital puntana, un delincuente irrumpió en el local, apuntó con un arma de fuego a la empleada y le robó su bicicleta recién comprada.
Romina Cruceño estaba concluyendo su jornada laboral en la panadería hasta que de pronto un hombre de unos 25 años que "medía cerca de 1,75, vestía un jean oscuro, un buzo y una gorra negra", precisó en un mensaje que difundió en sus redes sociales, irrumpió en el local, le apuntó con un arma de fuego, y, pese a eso, ella intentó detenerlo. Luego hubo un momento de forcejeo, pero finalmente, el delincuente la empujó hacia una heladera y unas rejas con las que cierran el comercio, las cuales cayeron sobre la joven.
Cruceño guardaba dentro de la panadería su bicicleta Firebird rodado 27, que era su medio de transporte, y hacía cinco días que su novio se la había obsequiado con la ayuda de un crédito. El ladrón escapó en el rodado y ella salió a perseguirlo. Lo buscó por calle San Martín y lo siguió hasta que el hombre se desvió por Tomás Jofré, metiéndose en contra mano.
Según informó El Chorrillero una familia que estaba por la zona asistió a la joven y la ayudaron a hacer llamados telefónicos y pedir auxilio a la Policía. Efectivos de Comisaría 1º, fueron al lugar, donde realizaron los trámites pertinentes y luego trasladaron a Cruceño al Hospital del Sur.
En las últimas horas ha compartido en las redes sociales datos sobre el violento asalto que sufrió y publicó fotos de su bicicleta, con la esperanza de recuperarla.
