La Policía Municipal de Tránsito, la Policía de la Provincia, el Programa Control Urbano y Defensa Civil intensificarán los controles en las calles, porque durante el último fin de semana detectaron un gran incumplimiento de los protocolos del distanciamiento social.
Durante el fin de semana se registraron aproximadamente treinta y ocho conductores con alcohol en sangre. Esos fueron los motivos por los que las instituciones mantuvieron una reunión en el Salón Azul de la Comuna en donde propusieron crear un plan de actividades para poder mejorar el panorama en la sociedad.
"Por el estatus sanitario de la provincia hay un relajamiento de la gente y deben entender que no pueden hacerlo. Vamos a intensificar los controles y haremos distintas tareas para que cada uno tome conciencia. Queremos hacer hincapié en que si uno se cuida cuidamos a los demás", expresó Diego Ochoa, secretario de Gobierno municipal.
En el transcurso de la semana decidirán cuáles serán esas acciones a seguir. "Nos preocupa que la gente no se quiera, porque el que maneja después de haber consumido alcohol no respeta a la vida, ni a él, ni mucho menos a la sociedad", aseveró Daniel Bravo, jefe de la Policía Municipal de Tránsito.
El funcionario además comentó que los operativos son diarios, pero que necesitan más responsabilidad y compromiso de todos. "Explicamos lo que no está permitido y sin embargo lo hacen. El domingo a las 13 teníamos personal abocado en las plazas, pero se ve que no nos alcanzó porque después de las 17 se produjo el desborde. Creo que después de estos encuentros vamos a llegar a buen puerto y la comunidad nos sabrá interpretar", acotó Bravo.