El embargo de medio millón de pesos a dos turistas que rompieron la cuarentena en la Villa de Merlo y la clausura y multa de supermercados en la capital de San Luis y alrededores, fue el saldo de los operativos realizados en esta provincia para hacer cumplir el aislamiento obligatorio ante la pandemia del Covid-19.
Los turistas embargados son una pareja de Buenos Aires, a quienes efectivos de la Comisaría N° 26 de la Villa de Merlo demoraron por incumplir la cuarentena preventiva, cuando los encontraron paseando por la sierra y fueron advertidos para que regresaran a su lugar de alojamiento.
Según fuentes oficiales, la orden policial no fue acatada por los turistas que fueron encontrados a la vera de un arroyo, por lo que fueron trasladados a la sede policial, donde quedaron demorados y se les realizaron los controles médicos correspondientes, además de proceder al secuestro del rodado en el que se trasladaban.
Desde la Fiscalía de Estado, se solicitó el embargo preventivo y la inhibición general de bienes por 500 mil pesos a cada uno y ayer el Juez de Instrucción Penal del departamento Junín, Jorge Osvaldo Pinto, hizo lugar a dicho requerimiento y decretó la medida cautelar hasta tanto se resuelva la situación procesal de los acusados.
Por otra parte, la dirección de Defensa del Consumidor de la provincia clausuró el miércoles un supermercado en Potrero de los Funes, distante a 17 kilómetros de esta capital, por lo que ya son tres las clausuras que se produjeron en San Luis.
El personal de la Dirección de Comercio y Defensa del Consumidor cerró el negocio, preventivamente, después de encontrar artículos de primera necesidad con precios muy por encima de los valores de referencia, según lo estipula la resolución 100 de la Secretaría de Comercio del Interior.
La misma medida se tomó sobre dos sucursales del supermercado Aiello, una cadena tradicional de venta de alimentos en San Luis, por tener en góndola productos vencidos y por falta de higiene; y en un minimercado de la Capital, por el aumento de precios y vender productos vencidos.
En el caso de los supermercados, el juez de Faltas Municipal, Alejandro Ferrari les impuso una multa de 40.000 pesos a cada sucursal, como condición para reabrir sus puertas.