Este miércoles trascendió que la Cámara Civil, Comercial y Minas Nº 2 de la Segunda Circunscripción Judicial de Villa Mercedes, en San Luis, agilizó un trámite que le permitiría a una familia poder adoptar a dos nenes.
El fallo se convirtió en el primero de la provincia y ahora la jueza, para resolver el caso, actuará de oficio. Así lo impulsó el Registro Único de Adoptantes (RUA) y la Defensoría de Niñez, Adolescencia e Incapaces Nº 1 porque los adultos, si bien reúnen las condiciones necesarias, no podían pagar los costos del abogado, un monto que superaba los 70 mil pesos.
Fernando Pascuet, uno de los magistrados, explicó a El Diario de la República que no se marcó ninguna jurisprudencia sino que se aplicó el artículo 616 del Código que "dice que podrá ser instado de oficio, a pedido de parte o de la autoridad administrativa. Que puede ser iniciado a pedido de los propios interesados o del juez, de acuerdo a los antecedentes y circunstancias que esté marcando el RUA. En este caso particular la entidad advirtió que los honorarios de los letrados eran elevados y que los pretensos adoptantes no estaban en condiciones económicas para soportar ese valor porque eran dos criaturas".
Aseguran que el fallo fue porque la familia estaba en condiciones de que la causa siguiera su curso judicial y buscaron fue priorizar a los dos nenes.
El Juzgado "debe evaluar si los adoptantes están o no en condiciones de hacer el trámite por sus propios medios de acuerdo al informe. Si ve que son personas que no pueden afrontar ese gasto, no es una imposición. Esto no quiere decir que todas las adopciones serán de manera gratuita o estarán a cargo del juez. Sino que es el RUA quien hace los informes y establece esta posibilidad. El trámite sigue siendo el mismo y, en determinadas circunstancias, podrá ser de oficio", aclaró Pascuet.
Por otra parte, el secretario de Familia Nº 1 Diego Nievas celebró: "Es fundamental porque es el primero de la provincia y, sobre todo, porque respeta los lineamientos del nuevo Código Civil, que rompió con los plazos y donde el eje es el chico. Y a él no se le pueden meter trabas. Lo que se logra es que la responsabilidad sea judicial y no del particular, si después la persona quiere buscar un abogado, pagar más y demás, no nos metemos con eso. Este es un trámite de protección y no puede haber impedimentos procesales".
Tanto la pareja, como los niños, viven en Villa Mercedes y "no realizó muchos pedidos sino que tenía la posibilidad del trámite y nos ocasionó una alegría tremenda poder destrabárselo. Nos ha cambiado el accionar y se incorpora un paso más. No solo es proteger al chico, darlo provisoriamente, sino que vamos por la parte definitiva. Más allá de quienes llevaron el recurso a la Cámara, tuvimos muy buenas respuestas con el resto de los que estaban en una situación similar, se inquietaron y hemos tenido manifestaciones de alegría, porque pensaban que podía demorar uno, dos o tres años pero ahora eso se acorta".
Ahora el paso que le sigue es una convocatoria a una única audiencia y el juez luego resolverá la sentencia del caso.