Este jueves Miguel Ángel Morales fue condenado a 10 años de prisión efectiva por el homicidio de Thalía Recabarren, una joven de 17 años que fue asesinada en junio de 2016. Pese a que el fiscal de la causa, Adolfo Díaz, solicitó una condena de 25 años de cárcel, el máximo en la escala penal para el delito que se le imputaba, el juez Jorge Toro decidió aplicarle una pena menor. La sentencia generó polémica en las redes, incluso su mamá, Anabella Recabarren, se mostró dolida e indignada por el fallo.
"Volvieron a matar a Thalía. Estoy destrozada porque no era lo que esperaba, pero el juez ha tomado su decisión, pensaba que por lo menos de 25 años iba a bajar la pena a 18 años pero se dieron 10 y no estoy conforme", señaló la mujer al diario Tiempo de San Juan.
Acompañada por familiares y el colectivo de Ni Una Menos, la madre de la víctima fatal de violencia de género tuvo duras palabras contra el juez que dictó la sentencia y en general apuntó contra la Justicia. "Siento que me han defraudado, hoy la Justicia me lo demostró. En 5 años, con buen comportamiento, está libre otra vez. Volvieron a matar a Thalía, se cagaron de risa de ella y la familia (SIC), del dolor de esta madre. Estoy destrozada, tengo mi corazón hecho mierda".
En el medio de la investigación y juicio por el brutal crimen de la adolescente hubo un sinfín de polémicas. Una de ellas fue que Miguel Ángel Morales llegó a juicio en libertad, después de permanecer en un instituto de menores. Además desde el entorno del joven cruzaron amenazas contra la familia de la víctima. De hecho, la madre de Thalía quedó detenida por varias horas en la Comisaría de Angaco meses previos al inicio del juicio, en lo que fue un verdadero escándalo judicial. "¿Que si creo que existe la Justicia? No, no la hay. Sobre todo porque soy pobre, he sido discriminada, pisoteada", manifestó Anabella.
