Por un desperfecto mecánico en su auto, una pareja y sus dos hijos menores estuvieron varados por horas en el costado chileno de la Cordillera de Los Andes. La familia enfrentó bajísimas temperaturas a 4.000 metros de altura, sufriendo dolores de cabeza y vómitos. Personal de Gendarmería Nacional los rescató.
Todo ocurrió el 10 de enero cuando volvían de vacacionar en el país trasandino por el Paso de Agua Negra. Según el relato de Cecilia Lahoz, protagonista de la terrible odisea, el vehículo sufrió un desperfecto mecánico cerca de las 19 horas y pese al intento de repararlo no se puso en marcha. "Quisimos empujarlo y no respondió el auto (nosotros casi nos morimos por empujar a esa altura). Decidimos no tocarlo más para no agotar batería", explicó la mujer.
La familia quedó varada en tierra chilena, con temperaturas bajo cero cuando el sol se ocultó. Fue en ese momento cuando los integrantes del clan comenzaron a padecer dolores y vómitos por el escaso oxígeno en la Cordillera. "Empezó un temporal de viento sur y aguanieve. Eran cerca de las 23 y seguíamos encerrados en el auto todos descompuestos por la altura. Los vidrios empezaron hacerse escarchilla de hielo por el lado de adentro y tuvimos los primeros síntomas de hipotermia", contó Lahoz.
Alrededor de la una de la mañana del viernes 11 llegó la salvación, cuando la familia advirtió la presencia de Gendarmería Nacional. En las alturas fueron asistidos con oxígeno y luego derivados al Hospital de Iglesia, en San Juan. "Fue un momento único que no se puede explicar. Jamás me sentí tan vulnerable. Ellos advirtieron que faltaba un vehículo. Si no hubiesen llegado, no sé si hubiésemos pasado la noche", agradeció la sanjuanina.