Indignación es lo que sienten los familiares de Tomás (5) y Cristopher (3), los dos chicos que fueron atropellados mientras estaban en la vereda de una calle muy transitada de San Juan. Los menores fueron embestidos por un sujeto, identificado como Germán Fernández, quien manejaba una Toyota Hilux a toda velocidad y terminó estrellándose contra la vereda. Los menores por suerte están fuera de peligro.
El siniestro que estuvo al borde de ser una tragedia ocurrió el sábado último cerca de las 20 en calle Aberastain, en la localidad de Pocito. Según publicó Diario de Cuyo, Fernández viajaba por Calle 11 y cuando quiso doblar hacia el Sur por Aberastain, perdió el control de su camioneta y terminó en la vereda. En ese mismo lugar estaban los chicos, sentados en un asiento de metal mientras su papá a pocos metros miraba vidrieras y esperaba a su esposa.
"Primero siento el ruido de una patinada. Cuando me doy vuelta veo a la camioneta que se empezó a culatear, iba de izquierda a derecha, zigzagueando. Por dentro decía "míralo al tonto este", cuando en un momento encaró hacia donde estábamos nosotros. Yo veía la trompa, las luces que se acercaban, venía como a 100 kilómetros por hora", contó Cristian Alberto Balmaceda (32), papá de los menores atropellados, en la sala de espera del Hospital Guillermo Rawson.
Antes de embestir a los chicos la Toyota Hilux chocó a una moto y a un contenedor. Los investigadores creen que esto, junto al poste que estaba cerca de donde estaban sentados los nenes, atenuó la violencia del impacto y evitó que los matara. "Me levanté y no veía a los niños. Lo primero que pensé era que estaban muertos, pero no. Nos ha salvado el poste. Si no estaba ahí me los mata. Ellos quedaron tirados, lloraban y me decían que les dolía mucho el cuerpo, pero estaban conscientes", aseguró el padre.
Las víctimas están internadas con cortes, raspones y moretones, pero fuera de peligro. En tanto que Fernández, el conductor de la camioneta, quedó detenido en la comisaría de Pocito.