En la mañana del martes, se llevó a cabo el juicio abreviado a Carlos Lucato, el mismo se realizó por videoconferencia desde la cárcel de Bouwer donde se encuentra detenido, el acusado fue condenado a 8 años de prisión efectiva al ser encontrado autor materialmente responsable de ataque al intendente de San Francisco.
En primera instancia, se leyó la acusación y el fiscal Alberione aclaró que el juicio abreviado se trata de un trámite procesal habitual previsto por nuestra ley penal, seguidamente Lucato reconoció el hecho que se le imputa “tal cual” había sido leído, se leyó la prueba que contenía una larga lista de nombres de testigos que aportaron a la causa, la descripción de elementos secuestrados durante la instrucción de la misma, informes de Policía Científica y balística e informes médicos.
El fiscal Alberione expresó que: las pruebas son numerosa y contundentes, se basó no solo en el reconocimiento de su agresor por parte de la víctima. También mencionó que entre Bernarte y Lucato hubo una discusión y enfrentamiento persona a persona en el momento del hecho.
En su explicación, informó que si bien no se halló el arma, en el lugar del ataque se encontró la vaina de una pistola del mismo calibre (22) del que produce la herida y que Lucato utilizó un arma con silenciador, de allí que los testigos presenciales del hecho declararan que no escucharon ninguna detonación esa madrugada del 6 de noviembre de 2022 en inmediaciones del Superdomo.
El fiscal informó en su alegato que: las intenciones de darle muerte son claras, por el arma utilizada, la modalidad, la espera, el lugar del cuerpo hacia donde apuntó (...) No existió en la investigación ningún elemento que nos llevara a tener otra hipótesis. Fue una cuestión personal y privada”, manifestó sobre el móvil del ataque.
El abogado de Bernarte, solicitó que se le imponga al acusado un restricción de contacto y acercamiento al intendente por el tiempo que dure la condena, algo a lo que la defensa y el juez accedieron y se suma a otra medida adicional establecida en la pena que es la de exigirle a Lucato un tratamiento psicológico.
No obstante, los abogados del acusado, Gabriel Cornaglia y Ezequiel Gramoy, informaron que él “ya se encuentra en tratamiento psicológico” y adelantaron que solicitaron al Juzgado de Ejecución Penal que continúe privado de su libertad en Bouwer y no sea trasladado a otro penal.
Lucato admitió estar arrepentido y dijo que no fue su intención tratar de matar al intendente. De esta manera la sentencia quedó firme y el odontólogo cumplirá su condena hasta el 6 de noviembre de 2030.