Duran 2020, se confirmaron por laboratorio 671 casos de salmonella en la provincia. El 82% se concentró en en la capital y un 18% en el interior. Además se dieron 881 casos sospechosos durante el año pasado, según un informe de la Dirección General de Coordinación Epidemiológica de la provincia.
En los primeros meses del 2020 se observó un mayor número de casos, comprendidos en las primeras ocho semanas epidemiológicas. Luego, entre las semanas 10 y 39, se presentaron infecciones aisladas. Y desde la semana 40, que inició el 27 de septiembre, se notificaron 310 casos confirmados.
En cuanto a las franjas etarias, los niños son los más afectados. De los 671 casos con los que cerró el año pasado, el 26% pertenece a niños de entre 0 a 9 años, luego le siguen los mayores de 64 años con el 17%, en tercer lugar las personas de 25 a 34 años con el 13% de los casos y en cuarto lugar los de 20 a 24 años con el 10%. En cuanto al género, el virus infeccioso afectó por igual a mujeres y varones.
Las altas temperaturas de enero son el caldo de cultivo para las bacterias en los alimentos. Es por eso que recomiendan ser cuidadosos con la ingesta de comida. Evitar comer en carritos de la calle, que están expuestos al sol, y también hervir los alimentos.
“Hay que prevenir, hay que estar atentos a la conservación y manipulación de alimentos, especialmente con la pandemia que aumentó los establecimientos caseros. Hay que asesorarse con bromatología para ver cómo pueden continuar con esa labor, pero con las normas vigentes”, advirtió la doctora Roxana Ramos, del programa de Epidemiología de la provincia.