Nacho González tiene 15 años y lucha contra una leucemia agresiva. Tenía planeado viajar a Estados Unidos para seguir con su tratamiento pero el cierre de las fronteras por el coronavirus impidió que pueda viajar. Ahora su papá, José, conseguir un medicamento que podría permitirle una mejor condición de salud para esperar un trasplante.
El adolescente estaba internado en el Hospital Posadas, en Buenos Aires, donde realizaba quimioterapias. En febrero, los médicos de ese nosocomio le dijeron que ya no podían hacer más nada por él. Ante la desesperación, el papá de Nacho investigó y dio con el médico Guillermo De Angulo, del Nicklaus Children´s Hospital, en Miami (Estados Unidos), quien promociona el uso de nuevas drogas de vanguardia para la cura del cáncer, en especial de la leucemia.
José consiguió un turno para su hijo en Miami. Tenían programado viajar en marzo pero no pudo debido al cierre de fronteras y a la cancelación de los vuelos. Nacho y su familia volvieron a Salta en un vuelo sanitario.
Al darle el alta médica, el hospital Posadas realizó el pedido de Blinatumomab, la droga que necesita el adolescente y que su padre gestiona ante el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Se trata de 56 ampollas, por un valor presupuestado de $16 millones de pesos, y el tratamiento consiste en dos ciclos de 28 días cada uno, con un descanso en el medio de dos semanas.
"El doctor De Angulo me dijo que con esta droga Nacho puede llegar a tener la oportunidad de entrar en remisión de la médula ósea. Así llegar al trasplante y tener una oportunidad de vida", sostuvo José.