El jueves por la noche, Hernando Fredes estaba trabajando como delivery en moto y fue atropellado por un automovilista en el túnel Celedonio Escalada de la ciudad de Rosario. Desde ese momento, permanece internado grave en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) y su familia exige justicia.
El hecho sucedió alrededor de las 22:40, cuando Fredes, que manejaba una moto Honda Titán, chocó de frente con un vehículo KIA Sorento de color gris que iba en contramano, conducido por Gustavo A., dueño de una reconocida rotisería del centro de la ciudad. Como consecuencia del siniestro vial, el repartidor terminó con múltiples fracturas.
¿Qué denuncian los familiares del repartidor atropellado?
Según su hijo Marcos, el hombre tiene “rotura de todos los huesos en el tórax, desde la cintura hasta el cuello y aplastamiento de la caja torácica, pulmones astillados”, por lo que permanece gravísimo, conectado a respirador artificial. Además, tiene rotura vertebral, una lesión en el corazón y traumatismo de cráneo.
Las acusaciones públicas de los familiares del repartidor sostienen que en el vehículo KIA viajaban cuatro personas “alcoholizadas y drogadas” y el acusado del accidente habría intentado darse a la fuga, que se frustró porque un testigo del hecho lo persiguió y lo obligó a detenerse.
Sumado a esto, el mismo testigo filmó una supuesta maniobra entre los ocupantes de la camioneta, para intercambiar lugares con el conductor. Por orden del fiscal Walter Jurado, el sospechoso fue trasladado a la Comisaría 7ma; en esa circunstancia, la familia de la víctima puso en duda que se hayan realizado los controles de alcoholemia y narcolemia de rigor.
El viernes por la tarde, un grupo de repartidores se congregó frente al comercio del conductor del KIA, para reclamar Justicia por su compañero. Ofuscados por la situación, vandalizaron el frente de la rotisería ubicada en inmediaciones de Balcarce y Santiago.