Hace un mes, la Universidad Nacional de Rosario (UNR), el Concejo Municipal y la Procuración General de la Corte de Santa Fe firmaron un convenio para investigar los orígenes de la contaminación en el arroyo Ludueña y analizar su saneamiento. Este miércoles, imágenes tomadas al curso del arroyo de zona norte de Rosario evidenciaron el estado del lugar, que acumula basura y altos niveles de toxicidad.
En el video que circuló rápidamente en las redes sociales, quedó expuesta la situación del afluente de zona norte, que trabajadores náuticos ven en repitencia cuando el río baja: plásticos, basura, efluentes cloacas y animales muertos, que hacen del cruce del arroyo una travesía lamentable.
Además, un estudio realizado por el Centro de Ingeniería Sanitaria de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la UNR, a pedido del bloque Ciudad Futura en el Concejo, reveló que había lugares del arroyo Ludueña cuatro veces más contaminados que otros y expuso la presencia de desechos cloacales e industriales en la cuenca del Ludueña.
Pese a lo impactante de la situación, los trabajadores de la zona explicaron que varias veces tanto ellos como algunas organizaciones ambientales encabezaron la limpieza del arroyo, pero encontraron resistencia de los vecinos del lugar: “Lo que podemos lo sacamos, pero si lo tiramos en un contenedor los vecinos nos denuncian” afirmó un pescador.
¿Cuándo se inició la investigación por la contaminación del arroyo Ludueña?
En 2020, la aparición de una “mancha negra” en el curso del arroyo desembocó en una investigación a cargo de la fiscal extrapenal María Laura Martínez, quien aún tiene en sus manos la tarea de analizar la responsabilidad de los actores en la contaminación del lugar. En ese momento, se encontraron bacterias “coliformes” que sirven como indicadores de contaminación del agua y se puso el foco en el Shopping Fisherton Mall Plaza.
En este contexto, la edila Luz Ferradas presentó en el Concejo tres pedidos de informe entre abril y mayo de este año: uno para que sancione e informe al Fisherton Plaza y otros dos restantes para que la Intendencia inspeccione por posibles vertidos cloacales al Country Golf, ubicado en la zona de Aldea, y al Aeropuerto Internacional de Rosario.
¿QUé pasó con el “sabalito barredor”?
En el año 2019, cinco empresas donaron a la Municipalidad una embarcación que fue conocida como el “Sabalito Barredor”. El objetivo era que se encargara de la recolección de basura que bajaba por el Ludueña. Sin embargo, por obras demoradas, burocracia y la posterior bajante del Paraná, nunca se puso en funcionamiento.
En la primera y única prueba que se hizo, la embarcación retiró dos volquetes llenos de residuos del arroyo Ludueña, equivalentes a diez toneladas. Actualmente, sufrió varios hechos de vandalismo y desde el Municipio analizan si conviene ponerlo en funcionamiento, ya que dudan que pueda con el caudal de residuos sólidos que se acumulan en el lugar.