Después del doble crimen en el barrio Molino Blanco y la balacera contra el Centro Municipal de Distrito Sur con pocas horas de diferencia, Omar Perotti sostuvo este lunes que “claramente no hay impunidad” frente al delito en Rosario. El gobernador de Santa Fe consideró que hay mejoras en ciertas actividades ligadas a la política de seguridad, pero también admitió que hay otros problemas sin resolver.
“Los niveles de detención superan largamente los de cualquier período”, aseveró el rafaelino sobre la acción judicial y el trabajo policial. Al mismo tiempo, reconoció que subiste la “preocupación” frente a los homicidios y los ataques con armas de fuego.
A partir de este diagnóstico, Perotti señaló que seguirán “invirtiendo fuertemente en equipamiento e infraestructura” para mejorar la seguridad. Así como elogió el desarrollo de investigaciones para desarticular organizaciones delictivas, apuntó: “Necesitamos mejorar en la prevención”.
En lo que va del año, en el departamento Rosario ya se cometieron al menos 199 homicidios. Entre las cuestiones a resolver, el gobernador de Santa Fe consideró que es imprescindible “liberar de armas el territorio” para mejorar la situación.
Consultado durante el acto del Día de la Industria Nacional, Perotti planteó que el desarrollo productivo es otro elemento clave para frenar la violencia, ya que “posibilita inclusión y una mejor calidad de vida”. Al respecto, añadió que el crecimiento económico debe abrir la puerta para “cambiar la realidad de sectores que hoy no tienen oportunidades”.
El gobernador santafesino consideró que la exclusión es la raíz de buena parte de los problemas de seguridad. “Allí empieza a resolverse cualquier instancia de desigualdad o violencia”, concluyó.