Pasada casi la mitad de un año en el que los barrios Ludueña y Empalme Graneros fueron escenario de buena parte de los homicidios en Rosario, la Justicia provincial dispuso este lunes la prisión preventiva de Mauro Gerez (28) y otras ocho personas. Se trata del supuesto jefe de sicarios de una banda narcocriminal vinculada a “Los Monos”.
De acuerdo a fuentes del Ministerio Público de la Acusación (MPA), el joven de 28 años era uno de los integrantes más importantes de una asociación ilícita que operó al menos desde julio hasta fines de mayo. La Fiscalía planteó que la organización tiene como líderes a Andy Benítez (25) y Julián Aguirre (23). Ambos están alojados en la cárcel de Piñero.
La investigación arrojó que la banda comandada fuera de prisión por Gerez se dedicaba a la venta de drogas en Ludueña y Empalme Graneros, un territorio disputado con Francisco Riquelme. “Fran” es considerado el referente de otro grupo rival asociado a Esteban Alvarado, el principal contrincante de “Los Monos” en Rosario.
Además del negocio narco, la asociación ilícita fue señalada como responsable de casi 40 extorsiones en estos barrios. En la pesquisa también detectaron amenazas, abuso, portación y tenencia ilegal de armas de fuego.
En esta instancia del proceso penal, el fiscal Pablo Socca no descarta que haya otros jefes aún no identificados. Tambén está abierta la hipótesis de que esta organización es una célula o parte de una estructura mayor. Por lo pronto, el MPA estableció que Gerez se dedicaba a reclutar “soldaditos” e incluso buscaba menores de edad para cometer delitos.
Una célula de “Los Monos” en Ludueña y Empalme Graneros
A la hora de reconstruir cómo operaban la banda, los investigadores identificaron a Dan Sacco (29) como una de las personas de máxima confianza del líder de los sicarios. El joven cobraba el dinero obtenido mediante extorsiones y actuaba como custodio de Gerez, además de decidir sobre el uso de armas de fuego y motocicletas.
En este segundo escalón se ubica Nicolás Bareiro (19) como el presunto encargado de elegir a las víctimas de las amenazas y balaceras. “Cuidu” vivía en Ludueña y entregaba a sus vecinos con información para que la banda organizara usurpaciones y extorsiones. Cuando conseguían viviendas, algunas se destinaban a la venta de drogas.
Finalmente, la Fiscalía señaló a Gustavo Cabaña (23) y Marcelo Roldán (28) como dos de los tiradores al servicio de la banda de Gerez. En su actividad habitual, también amenazaban a testigos para garantizar la continuidad del negocio ilícito. En la audiencia que concluyó este lunes también denunciaron a Nahuel Ángel (24), otro preso en Piñero, y a su hermana.