Lionel Messi y Antonela Roccuzzo llevan décadas construyendo una historia de amor que comenzó en su Rosario natal. Desde la infancia, su vínculo fue especial, y aunque la carrera del futbolista los llevó a diferentes ciudades y continentes, su relación nunca se rompió. Sin embargo, una reciente revelación del ídolo aportó una realidad sobre la pareja.
En una entrevista, el rosarino se mostró más abierto que nunca al referirse a su vida con su esposa. Entonces se remontó a su infancia, cuando se conocieron: “Con 13 años me fui para España y un poco que perdimos el contacto. Cuando volví a Rosario, en uno de los encuentros, fue cuando volvió el romance”.

“Nos volvimos a ver y ahí arrancamos a hablar otra vez. Siempre me gustó. En esa época se llamaba ‘amigovios’”, señaló, evocando sus primeros encuentros en Rosario y la química que los unió desde jóvenes.

En ese momento de la nota, el entrevistador quiso saber si Messi se percibía como una persona celosa y el futbolista se sinceró. “Era bastante celoso cuando era pibe, al principio. Después ya no. De hecho, ahora no”, explicó con total seriedad, mostrando la confianza que ambos han construido a lo largo de los años.

La pareja comparte tres hijos: Thiago, Mateo y Ciro, y su familia ha sido clave para mantener un equilibrio frente a la fama y la exposición mediática. El capitán de la Selección Argentina destacó que siempre intentan preservar la normalidad: “Tratamos de vivir lo más normal posible, dentro de lo que se puede”.
Hace un tiempo, la relación de Messi y Antonela volvió a estar en el centro de la atención tras un ida y vuelta con la periodista Sofi Martínez. Aunque algunos medios especularon sobre tensiones, fuentes cercanas aseguraron que no hubo conflictos y que Antonela y Sofi mantienen respeto mutuo.

Al final, Lio también aprovechó la oportunidad para hablar del apoyo que Antonela le brinda día a día: “Ella siempre está a mi lado, incluso en los momentos más complicados. Eso es lo que hace que nuestra relación funcione”.
A pesar de vivir en Miami por su carrera en Inter Miami, ambos mantienen fuertes lazos con Rosario y la Argentina, y continúan construyendo su vida familiar en un entorno que equilibra lo público y lo privado. Su historia sigue siendo un ejemplo de amor y compromiso duradero en el ámbito deportivo y mediático.