Una maestra santafesina pasó doce años en prisión por el crimen de su esposo ocurrido en 2005. Luego la Justicia comprobó que no había sido ella la autora del hecho, demandó al Estado y consiguió una compensación económica de $7 millones.
María Antonia Gauna, de Arquito, había sido condenada por el asesinato de su esposo, el agricultor Omar Bartorelli, mientras ambos dormían en la casa que compartían en Caseros. Luego habría intentado quitarse la vida con cortes en sus brazos.
Esto desde febrero de 2005 hasta diciembre de 2016 presa, pero luego un peritaje médico reveló que ella no podría haberse causado a sí misma esas heridas, y que habría sido un tercero quien atacó a María Antonia y a Omar. Su caso llegó hasta la Corte, que anuló el fallo anterior y ordenó su libertad.
Tras ser liberada, demandó al Estado, y esta semana recibió una sentencia favorable del Tribunal Colegiado de Responsabilidad Extracontractual N°2 de Rosario. Se ordenó pagarle siete millones de pesos por haberla privado de sus ingresos como docente, y provocarle daños y perjuicios.