Luego de la avalancha de quejas por el pésimo estado de la traza, la generalizada determinación de automovilistas de no pagar el peaje y la decisión de la Intendencia de Carcarañá de clausurarlo por deudas, aparecieron las promesas de repavimentación de la Autopista Rosario – Córdoba.
"Las obras no se habían podido realizar por problemas administrativos nuestros, pero ahora sí estamos en condiciones de realizarlos", anunció Patricia Gutiérrez, administradora general de Vialidad Nacional. "Los trabajos deberían haberse hecho antes", admitió.
Pese a las deplorables condiciones de la vía, y a la enorme demora en reaccionar, la funcionaria criticó a los conductores que no pagan el peaje. "Ese cobro está asociado al funcionamiento de toda la autopista, no a 15 o 20 kilómetros", dijo a TN.
Además, quitó responsabilidades a la actual concesionaria (Corredor Panamericano II SA) ya que los trabajos debían haber sido ejecutados por la anterior concesión (Cinco Vial) cuyo contrato venció en agosto. Claro que nunca se sancionó a la firma por este incumplimiento.
"Hemos estado en charla con la empresa y tratamos de hacer las obras lo más rápido posible", aseveró y añadió que la idea es comenzar en marzo.
Por su parte, el diputado nacional Luis Contigiani pidió el fin de la actual concesión por incumplimiento del contrato y falta de obras. "Habría que ver cuanto recaudó la empresa en este tiempo y cuánto invirtió. Vialidad Nacional debería defender los intereses nacionales y no los empresarios", disparó.
