El gobernador Miguel Lifschitz firmó el decreto con el que se finalizó formalmente el vínculo entre la Provincia y la empresa Arssa por la concesión de la Autopista Rosario – Santa Fe. Se estableció que ambas partes renuncian a cualquier tipo demanda en contra.
El ministro de Infraestructura y Transporte de Santa Fe, José León Garibay, señaló que a esta instancia se llegó luego del incumplimiento de la firma respecto a la repavimentación de la traza, aunque admitió fallas de la Provincia al no actualizar las tarifas y el pago de obras complementarias.
"Luego de analizar informes de una consultora técnica, otra jurídica y otro de Fiscalía, se llegó a un mutuo acuerdo de rescisión que fue firmado esta semana por el gobernador", manifestó y añadió que con esta determinación la firma renuncia a una serie de reclamos que tenía contra la Provincia.
Actualmente la Autopista Rosario – Santa Fe es manejada por el Estado provincial, que puso en marcha una serie de inversiones para mejorar la traza e incorporar el Telepase, pero además aplicó un bestial aumento que en algunos casos llega al 100%.
