La localidad de Loma Alta, ubicada en el centro de la provincia de Santa Fe está convulsionada debido a que la jefa comunal, Natalia Alderete, decidió cerrar el gobierno local, dejar a los empleados sin cobrar y al pueblo sin los servicios habituales de administración.
El pueblo está ubicado a doce kilómetros al norte de la ciudad de Gálvez, en el departamento San Jerónimo. La medida de Alderete disparó la denuncia de la Federación de Trabajadores Municipales (Festram), que además la responsabilizó por el endeudamiento del municipio, tras la derrota que sufrió ella en las PASO.
En un comunicado, el gremio expuso que Alderete "abandonó literalmente la sede de gobierno, cerrando sus puertas y dejando adeudados los sueldos del mes de septiembre a los trabajadores que no pueden desarrollar sus actividades, no sólo por retención de tareas por incumplimiento de pago, sino también porque la administración permanece cerrada".
Desde Festram también señalaron que la deuda de la comuna supera los 200 mil pesos, una cifra muy importante teniendo en cuenta que el pueblo tiene sólo 350 habitantes.
La denuncia ya fue radicada en el Ministerio de Trabajo y además el gremio ya solicitó la intervención de la comuna para normalizar la situación. Por su lado, Alderete faltó a la audiencia prevista para el última jueves en la cartera laboral.
En la presentación, el gremio interpretó que "las actuales autoridades perdieron las elecciones primarias y por tal razón no podrán presentarse en las próximas elecciones, por lo que de manera irresponsable e ilegal abandonaron sus deberes institucionales dejando en situación de acefalía al Estado Comunal de Loma Alta, a los trabajadores y a toda la comunidad", precisaron.