La policía desbarató en las últimas horas dos fiestas clandestinas y demoró a más de 50 jóvenes que participaban de las mismas, pese a todas las restricciones sanitarias por el coronavirus. Secuestraron una enorme cantidad de bebidas alcohólicas.
La primera intervención se dio pasadas las 2.30 de la madrugada, cuando personal del Comando Radioeléctrico se acercó hasta Camilo Aldao al 500 por la denuncia de un vecino. Allí los agentes encontraron con la música a todo volumen y una fiesta no autorizada, de la que participaban 42 personas, entre ellas, una de las moradoras de la casa.
Horas más tarde, el Comando Radioeléctrico debió intervenir en un caso similar, en un domicilio ubicado en Pasaje Ancón al 3400, en la zona sudoeste de la ciudad. Allí los atendió una joven de 29 años que dijo ser la dueña de la casa y que se encontraba con algunos familiares.
Al pedirles que salieran encontraron a once personas, que quedaron demoradas en la comisaría 32°. Además secuestró gran cantidad de bebidas alcohólicas, entre ellas 13 botellas de champagne y dos de vodka, energizantes y hielo.
De ambos procedimientos se dio aviso a la Unidad de Covid, Fiscal Dr. Carlos Covani, que definirá en las próximas horas la situación procesal de ellas.