El Patio Cívico de la Gobernación fue el espacio elegido para el acto formal de inauguración del OJO, el nombre con el que eligierion identificar la Central de Información Criminal Operativa, que ya funciona en el subsuelo del edificio sobre calle Moreno.
Se trata de un espacio inédtio que combina información estadística de diferentes áreas y las transforma en datos prácticos que posibilitan orientar los patrullajes.
"Uno patrullaba en función del olfato de lo que creía que iba a suceder", explicó Pullaro a la prensa para explicar cómo se trabajaba y qué cambios representa la puesta en marcha del OJO.
"Esta central apunta a la construcción de información cosolidada, esa información la sacamos del 911 de los centros territoriales de denuncia", continuó el ministro de Seguridad sobre la materia prima que alimenta los servidores de la oficina.
Con esos datos sobre la mesa, "se puede trabajar en la predicción delictiva sabiendo en qué zonas zonas hay más índice de inseguridad y bajo qué modalidad. Así se puede ejecutar una estrategia en función de la cantidad de móviles con la que uno dispone".
Junto a Pullaro estuvo el gobernador Miguel Lifszhitz que resaltó que "de las estrategias combinadas salen resultados sólidos".
En el OJO trabajan las 24 horas, en turnos rotativos, unos 150 operadores civiles y policías administrativos con distintos roles. Para cristalizar la central se invirtieron casi cien millones de pesos.