Este jueves al mediodía se realizó un ejercicio de rescate de una avioneta en el río Paraná, con el objetivo de poner en práctica los protocolos de atención a víctimas múltiples en zona de islas y balnearios. Entre las instituciones y dependencias intervinientes se encontraron Prefectura Naval Argentina (PNA), Defensa Civil, Helicópteros Sanitarios, SIES, HECA, áreas de Control, Guardavidas del Corredor La Florida, ambulancias y sanatorios privados de la ciudad, y Bomberos Zapadores, entre otros.
En las tareas estuvieron involucrados dos helicópteros de rescate sanitarios, un helicóptero hidrante, una lancha ambulancia, motos de agua, lancha de rescate de Guardavidas, embarcaciones varias de Prefectura, ambulancias, motos, unidades de logística y bomberos.
Se trabajó sobre la hipótesis de un accidente en el que una aeronave despegada de un aeródromo no controlado con destino al aeroclub de la ciudad de Victoria (Entre Ríos) no pudo declarar su emergencia a la torre de control del aeropuerto Rosario y perdió altura en vertical al puente Rosario-Victoria, precipitándose sobre la zona de islas. Como resultado, sus dos tripulantes quedaron gravemente heridos y tres personas que se encontraban en tierra resultaron lesionadas.
Raúl Reinone, director de Defensa Civil, se refirió a la práctica desarrollada y señaló: "A diferencia de un simulacro, el ejercicio está hecho sobre una hipótesis real, en este caso, un avión que cae en la isla, con dos víctimas graves, que fueron trasladadas una al HECA y la otra al Italiano. Y otras tres víctimas que estaban en la playa circunstancialmente y fueron llevadas en helicóptero".
El funcionario destacó que el fin de este ejercicio era poner en práctica determinados protocolos, en esta oportunidad, víctimas múltiples heridas en la isla. "El desafío fue la coordinación y no las actividades personales de cada área. Cuando hay mucha gente actuando, si no hay una coordinación y un respeto por los protocolos, se pierde mucho tiempo y eso se traduce en la vida de las personas. Por eso, fundamentalmente se puso en juego las actividades de lo público, lo privado y el trabajo personal con quienes todavía no nos conocíamos", explicó.
"Todo el ejercicio no duró más de veinte minutos desde la activación, ya que cada helicóptero estaba en su base, como cada una de las áreas. Entendemos que los tiempos fueron buenos, aunque reitero que, de todas maneras, no estábamos midiendo el tiempo sino la coordinación entre las áreas", subrayó Rainone.