Por sexto año consecutivo, Eliana Orellano junto a un grupo de voluntarias que integran la ONG Rayitos de Sol, tejen suaves gorritos que luego serán entregados a niños con cáncer del Hospital de Niños.
La iniciativa que llevan adelante de manera silenciosa en Río Primero, nació tras conocer las historias que viven las familias que tienen a sus pequeños enfrentando esta durísima enfermedad, a través del relato de una sobrina de Eliana que colabora en la Fundación Soles.
Así, con muchísimo amor y dedicación, estas mujeres tejen los gorritos que luego entregan. "Una sola vez fui acompañada, después fui siempre sola porque no es fácil enfrentar lo que ves ahí", dice Eliana, quien inició el proyecto hace seis años, y se emociona hasta las lágrimas, porque en cada una de ellas hay un rostro reflejado de esos pequeños llegados de distintos puntos de la provincia.
"Apenas llego rezo antes de entrar para estar fuerte y entera, y lo vuelvo hacer al salir. Yo tuve esa enfermedad, pero verlo en un niño es algo muy duro", relata y se le quiebra la voz.
Sin embargo el amor que recibe es mayor y se vuelve su fuente de energía para no desfallecer y continuar en silencio, haciendo una obra de un valor incalculable.
"Los niños se ponen tan felices de recibir un regalo, que eso me reconforta", Eliana no cuenta con ningún tipo de aporte de materiales ni económico. Su tarea es solventada por ella misma. Una mercería de Santa Fe, enterada de su acción, le obsequió una bolsa con lanas.
Ella sólo espera que su gesto produzca un efecto contagio y más gente se sume ya sea donando lanas (que deben ser nuevas y suaves) o tejiendo. "Hay muchas necesidades y mil cosas por hacer", asegura dejando la invitación abierta ya que actualmente están preparando lo que será la primera visita del año al Hospital.
Para colaborar con Rayitos de Sol, comunicarse con Eliana al 3574 638436