Todo comenzó cuando ella recibió en su teléfono celular una serie de mensajes de alto contenido sexual por parte de hombres que le pedían "tarifas" por "sus servicios".
Al principio, pensó que se trataba de alguien que había llamado a un número equivocado, pero la insistencia y la reiteración de los audios y textos encendieron el alerta.
Pero además, una conflictiva separación de su expareja la llevaron a sospechar de que detrás de todo esto, había algo más grave que "una broma pesada".
Lo cierto es que en la Cámara Segunda del Crimen de Río Cuarto es la caja de resonancia de un hecho cuanto menos insólito e indignante.
Allí, una mujer interpuso una demanda por daños y perjuicios contra su expareja, a la que acusa de perjudicarla a través de una publicación apócrifa.
Según informó a Puntal.com el abogado querellante, Lautaro Arcuri, esa persona se habría contactado con el sitio web de avisos gratuitos para incluir allí la oferta de servicios sexuales, a nombre de su exmujer.
Arcuri contó que cuando la mujer se presentó a la Policía a radicar la denuncia, no habría tenido eco. "No quisieron tomarle la denuncia", dijo.
Por eso se presentó a la Cámara Segunda del Crimen y radicó una querella por injurias, un delito que está contenido en el artículo 110 del Código Penal y que prevé una multa de caracter económico.
"Se trata de una búsqueda ejemplar para contrarrestar la liberalidad de las redes sociales y los delitos informáticos", comentó el letrado.
Cómo lo hizo. El aviso fue colocado en una reconocida página de oferta sexual de mujeres, que tiene la modalidad de ser gratuita, y esa es una de las principales pruebas que aportó la víctima.
Realizó capturas de pantallas del teléfono celular de la denunciante, así como también del sitio web.
A través de esas capturas, la mujer busca acreditar la catarata de mensajes y llamadas que estuvo recibiendo durante largo tiempo.
¿Cómo se llegó a la pista de su expareja? Arcuri mencionó que a través del área Delitos Informáticos de la Policía se determinó el IP de la computadora de donde se originó el aviso perjudicial.
Así fue como se llegó a determinar que la pc pertenecía a un familiar del exesposo de la denunciante.
Arcuri mencionó que además de este episodio, la persona denunciada ya había protagonizado con anterioridad otros hechos "moralmente violentos".
Por ejemplo, señaló que en una ocasión fue sorprendido por la mujer cuando la espiaba a través de la puerta de su domicilio.