De un día para otro, la vida del comodorense Raúl Cárcamo cambió por completo ya que tuvo que dejar su lugar de origen para pelear por su salud desde Buenos Aires porque le diagnosticaron una enfermedad compleja que requiere de un trasplante bipulmonar.
Los médicos comunicaron que el hombre padece atelectasia pulmonar, por lo que su única posibilidad de seguir con vida es un trasplante bipulmonar. Cárcamo era operador de LU4 en Comodoro Rivadavia, pero tras las complicaciones que aparecieron por la enfermedad, se tuvo que mudar a Capital Federal hace tres años.
El hombre se mudó junto a su esposa, quien lo acompaña en todo momento y espera que aparezca un donante que salve la vida de su pareja para que puedan regresar a su hogar y, de esta manera, reencontrarse con la familia.
“Hay que remarla con fe y esperanza”: el testimonio de la esposa del comodorense
Fabiola Torrico, esposa de Raúl, habló con ADNSUR y contó que tuvieron que mudarse a Buenos Aires luego de que, en el tercer control médico, los profesionales les recomendaran quedarse allá por el tiempo de espera que puede llevar la aparición de un donante de órgano.
Desde la habitación de un hotel en la que viven hace unos años, la mujer expresó que estuvo presente en operativos, pero no llegó a concretarse el trasplante. “Hay días buenos y no tan buenos para él. La falta de familia lo está sintiendo mucho. No podemos volvernos porque él necesitaría viajar en avión sanitario”, dijo.
Por el diagnóstico médico, Raúl tuvo que solicitar la jubilación en su trabajo y ahora la cobertura de salud la recibe por PAMI. “En general estamos bien, hay gente que está peor así que no queremos quejarnos. La obra social nos da un mínimo para pagar el hotel. Nos toca seguir esperando”, manifestó.
Por su parte, Fabiola sostiene la esperanza para que llegue el donante que Raúl necesita. “El órgano que se dona va a seguir dando vida. Hemos visto muchos casos de donación y hasta familias del donante que se han encontrado con quién recibió el órgano de su ser querido”, enunció.
Por último, Torrico aseguró que no se van a rendir hasta encontrar el órgano que Raúl necesita. “Hay que remarla con fe y esperanza de que pronto se pueda cumplir el milagro”, finalizó su declaración al medio local.