La pequeña L., de sólo 6 años, conmovió a la ciudad con su “desaparición”. Es que, a partir de un posteo en las redes sociales, todo el mundo se puso a buscarla. Afortunadamente, se encuentra sana y salva, a disposición de la Delegación de la Región Oeste de la Secretaria de la Niñez y Adolescencia.
De acuerdo a la publicación en Facebook, no se había sabido nada de ella desde la media mañana, luego de que fuera desde el barrio Zazpe al Mora. Más tarde, se supo que había sido vista con un hombre, con una discapacidad, llorando.
Lo cierto es que detrás de esa historia, hay una causa judicial (en la que estaría implicado el padre), la cual está siendo investigada por la fiscal Flavia Burella.