Este viernes en la Plaza de Armas de la Escuela de Suboficiales de la Armada Argentina (ESSA) se llevó a cabo la ceremonia de entrega de uniformes a los Aspirantes de la Promoción 127° y se celebró además el Día del ex Aspirante Naval.
La ceremonia fue presidida por el Director General de Educación de la Armada, Contraalmirante Gustavo Adolfo Príncipi, acompañado por el Director de la ESSA, Capitán de Navío Marcelo Raúl Rojas.
Además, estuvieron presentes autoridades militares de la zona, representantes del municipio de Coronel Rosales, las Promociones 20, 21 y 28 de la Ex Escuela de Mecánica de la Armada (Ex ESMA), Veteranos de la Guerra de Malvinas, familiares e invitados especiales.
El Director de la ESSA pronunció palabras alusivas y dirigiéndose a los Aspirantes expresó, “Esta ceremonia reafirma el hecho de que cada uno de ustedes es capaz de alcanzar las metas que se propone. Piensen que hoy logran vestir el uniforme que los identifica como integrantes de nuestra querida Institución”.
“A partir de este momento -continuó-, este uniforme los obliga a honrarlo con un comportamiento ejemplar en toda oportunidad, tanto en el servicio naval como en su vida particular. Deberán poner especial reparo en enaltecer a la Armada Argentina con humildad, firmeza, constancia, obediencia, lealtad, buen trato y verdad demostradas en sus conductas personales”.
El Suboficial Principal Miguel Ángel Lamolina, integrante de la promoción 20º de la Ex ESMA, hizo alusión en su discurso a los recuerdos de cuando tenían entre 14 y 15 años, en los días que transitaron en la Escuela que los formó “primero como personas de bien, luego como militares y finalmente como marinos dispuestos a defender los intereses de la Patria”.
También se dirigió a los Aspirantes y afirmó: “Les aseguro que la Armada no fija límites para su desarrollo personal y cada uno es artífice de su propio destino. También hay presentes Veteranos de Guerra, náufragos, tripulantes de aeronaves, buques, submarinos e infantes, pero más allá de nuestro destino o de las metas alcanzadas, todos sin excepción tenemos una impronta, una marca, algo indisoluble y que nos unirá hasta el último de nuestros días: el amor y el agradecimiento por esta Escuela”.
Acto seguido, las autoridades y representantes de las Promociones 20, 21 y 28 de la Ex ESMA descubrieron una placa conmemorativa.
Fuente: Gaceta Marinera