Desde las primeras horas de este miércoles, la ciudad de Posadas se ve afectada por esperas prolongadas, paradas de colectivos abarrotadas y demoras en la frecuencia de las unidades del Transporte Urbano de Pasajeros.
La Unión de Tranviarios Automotor (UTA) informó ayer que esta situación se debe a un quite de colaboración llevada a cabo por los choferes, quienes únicamente cumplen con sus 8 horas laborales y no realizan horas extras.
La medida comenzó a regir a partir de las 21:00 del martes, tomando por sorpresa a los usuarios que se encontraron con la decisión de que los dejaron esperando largos minutos en los refugios para proteger a los designados de los colectivos.
El quite de colaboración afectará principalmente al servicio nocturno y a los momentos en que se deba realizar el cambio de chofer. Aunque el servicio no será suspendido, se esperan demoras significativas.
La razón detrás de esta medida de fuerza es la falta de pago de salarios a los choferes, y se mantendrá hasta que se resuelva este problema.