Emilio Talpone, un joven de 2,02 metros de altura, vivió una experiencia inesperada cuando intentó obtener su licencia de conducir en la Ciudad de Buenos Aires.
Durante la revisión médica, los empleados de las oficinas de Seguridad Vial le informaron que no podían tomarle el examen estándar debido a su altura. Talpone, indignado, relató lo ocurrido en TikTok, donde su video alcanzó casi un millón de reproducciones en pocas horas.
En la Ciudad de Buenos Aires, una normativa específica exige que las personas que miden más de 2 metros o menos de 1,5 metros pasen por una prueba funcional antes de rendir el examen común.
Este requisito, exclusivo de CABA, busca evaluar si los conductores pueden manejar un vehículo de manera segura, dadas las dimensiones estándar para las que están diseñados los autos.
La prueba funcional, que se realiza en la sede central de la Pista de Roca, verifica si el conductor puede controlar adecuadamente el vehículo. En caso de que la altura impida tomar el volante o alcanzar los pedales, se pueden realizar adaptaciones, como asientos modificados o pedaleras elevadas.
En su relato, Talpone expresó su molestia por lo que consideró una pérdida de tiempo, aunque no perdió el sentido del humor: “Así que ya saben, si miden más de dos metros y van a sacar el registro, limense un poco los talones”. Su historia generó cientos de comentarios de usuarios impactados por la normativa y solidarios con su situación.
Ahora, Emilio deberá presentarse a la prueba funcional para determinar si está apto para manejar un auto estándar. Este episodio puso en evidencia una reglamentación poco conocida.
