En una doble sesión en el Senado, la oposición va por la sanción de la demorada ley de movilidad jubilatoria que el presidente Javier Milei amenaza con vetar, mientras que hay final abierto sobre el aumento de las dietas, un tema que la vicepresidenta Victoria Villarruel someterá a debatir en busca de que los senadores le pongan punto final a la polémica.
Un día después de la audiencia pública en la que se presentó el candidato del Gobierno a la Corte Suprema de Justicia, Ariel Lijo, la Cámara Alta sesionará por partida doble. Primero, a las 11, realizará una sesión ordinaria para tratar temas con dictamen de comisiones, entre los que figura el proyecto aprobado en la Cámara de Diputados para actualizar y recomponer las jubilaciones.
La iniciativa tiene altas posibilidades de aprobarse tal como vino de la Cámara Baja porque la avalan, con dictamen de mayoría, Unión por la Patria, al menos cuatro radicales (Martín Lousteau, el fueguino Pablo Blanco, el pampeano Daniel Kroneberger y el catamarqueño Flavio Fama) y el santacruceño José Carambia, que comparte bloque con Natalia Gadano.
Con esos apoyos, habría 38 votos garantizados a favor (uno más que el quórum), y podrían sumarse otros senadores de fuerzas provinciales, como la rionegrina Mónica Silva, que responde al gobernador Alberto Weretilneck. No será el caso de la cordobesa Alejandra Vigo, quien se encuentra de viaje en Estados Unidos en una comitiva con el exgobernador, Juan Schiaretti, y otros mandatarios provinciales y legisladores.
En comisiones, el oficialismo firmó un dictamen de minoría que solo deja en pie el aumento mensual de las jubilaciones por IPC (Índice de Precios al Consumidor) y elimina o modifica todos los demás artículos para morigerar el impacto fiscal de la ley, calculado por el Gobierno en un punto extra del PBI para 2024 y 1,2% para 2025.
La Libertad Avanza no está de acuerdo en otorgar un aumento adicional anual por eventual diferencial del Ripte (salarios) contra IPC; ni con incorporar una garantía para el haber mínimo, que será equivalente a 1,09 canastas básicas totales; ni con garantizar los flujos a las cajas provinciales no transferidas a la Nación y la cancelación de juicios de jubilados con sentencia firme.
Por otra parte, el dictamen de mayoría de la oposición también fija, por única vez, una compensación del 8,1% para sumar al 12,5% ya otorgado por el Gobierno por DNU, y de esa forma alcanzar el 20,6% de inflación registrada en enero. El Gobierno acepta otorgar el incremento, pero a partir de la sanción de la ley y no de forma retroactiva.
Milei avisó en reiteradas oportunidades que no le temblará el pulso para vetar la ley si resulta sancionada, porque atentaría contra el objetivo del déficit cero. El Congreso puede blindar la norma con dos tercios de los votos; en Diputados ya los alcanzó y en el Senado llegar a ese número no es imposible para la oposición.
Polémica por las dietas
A continuación de la sesión por jubilaciones, se realizará otra donde se tratará el tema de las dietas, luego de que los senadores salieran beneficiados del último acuerdo paritario con los gremios legislativos, por el cual pasarían a cobrar un sueldo de $9 millones brutos. La suba acordada esta semana es del 6,5% en dos tramos.
La sesión fue convocada por Villarruel en un intento de despegarse del tema y que sean los senadores quienes resuelvan la polémica sobre sus sueldos. Sin embargo, hay final abierto respecto al resultado de la sesión, que tiene en el temario dos proyectos diferentes.
Unión por la Patria quiere aprobar su iniciativa, que dispone un tope máximo para los sueldos de los tres poderes del Estado, con lo cual involucra al propio Milei y a la Justicia. Según la iniciativa, para el presidente, el vice, los jueces de la Corte Suprema, senadores y diputados nacionales, el límite será equivalente a 20 Salarios Mínimos, Vitales y Móviles.
El segundo proyecto pertenece a Luis Juez, jefe del bloque PRO, y busca dejar sin efecto la resolución 8/24, que dispuso un incremento de las dietas a partir de mayo. Es el aumento que fue votado en abril de manera sorpresiva, a mano alzada y sin debate. Si se aprueba el proyecto del cordobés, las dietas volverían a quedar desenganchadas de la paritaria legislativa.
Villarruel tiene decidido no intervenir. Según afirman en su entorno, la vicepresidenta espera que los senadores pongan la cara por el aumento. “De frente y de forma pública”, dijo al anunciar la convocatoria a la sesión, y habló de una “sobreactuación” que alcanza, según su visión, tanto a Milei como a los legisladores.
Fuentes de Presidencia indicaron que en una reunión de Labor Parlamentaria llevada a cabo la semana pasada, donde se decidió posponer para este jueves el debate jubilatorio, Villarruel planteó que “venía demorando hace 25 días la paritaria” para ver si los jefes de bloque acordaban desatar sus dietas y así evitar una nueva polémica. La respuesta, según esa versión, fue negativa.
En Diputados, en tanto, Martín Menem confirmó que no hubo ni habrá novedades sobre el tema, más allá de la última resolución que concedió un aumento en tres tramos. En la sesión de este miércoles, un diputado radical, Francisco Monti, lanzó una chicana: “No soy senador, estamos seis palos abajo de serlo”.