El próximo 13 de julio el campo parará. Así lo confirmaron desde Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), una de las cuatro entidades que conforman la mesa de enlace. La medida se tomará en el marco de la “honda preocupación” que les causa la situación del país.
Las 16 confederaciones que integran la entidad se reunieron y decidieron revalorizar el documento firmado por más de 35 cámaras y asociaciones empresarias. En este “se hace una descripción de los principales problemas que enfrenta el país, el grave escenario económico y la falta de rumbo cierto”.
“Excede al campo y compromete a la población en general, sumida en la angustia, la pobreza y la desocupación, de no saber hacia dónde vamos económicamente, con inflación intolerable, sin crédito externo o interno, tipos de cambio incontrolables, brecha cambiaria, sin referencia de precios internos, ventas paralizadas, temor y violencia, inseguridad y vacío político sin precedentes”, señalaron.
Asimismo, volvieron a hacer mención a la falta de gasoil que afecta a todo el país, al referirse a “la necesidad imperiosa” de que el Estado asegure la provisión del combustible, “frente a la parálisis que sufre la comunidad en general, debiendo constantemente mendigar litros, para desarrollar su vida cotidiana o pagar sobreprecios para poder trabajar con continuidad”, describió la gremial que integra la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (CEEA) junto a la Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria Argentina (FAA) y Coninagro.
Por otra repudiaron “la constante invocación de funcionarios del Gobierno, que insisten con formulaciones ridículas, de sumar presión fiscal, imaginar ingresos extraordinarios o tratar al sector agropecuario como un enemigo a expoliar”.
Los otros temas que entran en el reclamo
En otro orden, la entidad presidida por Jorge Chemes fue más allá de los temas que afectan directamente al sector. “Rechazamos aquellos proyectos destinados a destruir la independencia de poderes, la Corte Suprema y el valor de la justicia, para lograr fines personales”, en referencia a la iniciativa de ampliar a 25 los integrantes del máximo tribunal.
También instaron “al saneamiento del gasto público, respetando la nivelación de ingresos y gastos, como primer paso de una economía sustentable”; y manifestaron “el cansancio atormentador del permanente descenso de nuestra calidad de vida, de nuestro futuro y de la pérdida de las oportunidades que nos ofrece el contexto internacional”.
“Por todo ello, el 13 de julio estaremos, sin comercializar, demandando un cambio de rumbo cierto en lo económico y una modificación urgente de la política de abastecimiento de combustibles, pues resulta imposible continuar bajo las circunstancias políticas y económicas del presente”, señalaron los organizadores, y garantizando que lo harán “en paz”.
“La consigna será defender nuestros derechos, ante los atropellos de un Gobierno, que no escucha y que nos somete a la incertidumbre y la desazón día a día”, finalizó el comunicado de la gremial.