Con la participación de más de 300 representantes de todo el país, la UCR reunió a su Convención Nacional y prometió sostener hasta el final la propuesta del titular del partido, Gerardo Morales, y de Horacio Rodríguez Larreta (PRO) de ampliar Juntos por el Cambio, aunque no habrá alianza electoral con el gobernador cordobés Juan Schiaretti antes de las PASO.
El pronunciamiento coincidió con un comunicado motorizado por Morales y Larreta para capitalizar la victoria de Claudio Poggi en San Luis (con apoyo del peronista Adolfo Rodríguez Saá) e insistir en una convocatoria a otros sectores, a pesar del rechazo de la precandidata Patricia Bullrich y el expresidente Mauricio Macri.
A pocas horas del cierre del plazo para la inscripción de alianzas electorales, la Convención Radical se congregó en el Salón Ombú de Parque Norte y ratificó su pertenencia a Juntos por el Cambio, aunque insistió en ensanchar la coalición y volvió a sobrevolar el nombre de Schiaretti.
“Tenemos que afianzar, ampliar y mejorar nuestra coalición para que se incorporen todos aquellos que comparten nuestros valores y nuestros objetivos generales en este momento crítico”, expresa el documento aprobado por unanimidad en el encuentro, encabezado por Gastón Manes, hermano del diputado y precandidato presidencial Facundo Manes.
Entre selfies y abrazos de correligionarios, Morales insistió con la idea que en los últimos días puso en crisis la unidad de Juntos por el Cambio. “Vamos a definir esta concepción de espacio lo más amplio posible hasta el minuto final que nos toque asumir el Gobierno nacional”, afirmó el gobernador jujeño en diálogo con la prensa.
Morales puso la victoria en San Luis como un caso testigo y calificó al ganador, Poggi, como “un referente del peronismo puro y duro” que se sumó a la fuerza opositora.
Sin embargo, no todos hicieron la misma lectura. “Hace siete años que Poggi está en Juntos por el Cambio, lleva cuatro elecciones ganando”, aclaró el cordobés Mario Negri, titular del bloque de diputados radicales, en un intento de separar los tantos respecto de Schiaretti, que irrumpió en la discusión hace tan solo dos semanas.
Negri sostuvo que, a casi diez días de la elección en Córdoba, el ingreso de Schiaretti es “un tema terminado”. Por el contrario, Morales dejó la puerta abierta y afirmó que hay un “compromiso” con Luis Juez y Carasso, los precandidatos a gobernador y vice, para “rediscutir el tema respecto de los tiempos”.
Al complejo de Parque Norte también se acercaron dos gobernadores radicales que resultaron fortalecidos en las urnas el último domingo: Rodolfo Suárez (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes). Suárez llegó acompañado por Alfredo Cornejo, el ganador de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias por Cambia Mendoza.
“Si queremos ganar, tenemos que ampliar. No tiene que ver con un nombre o una persona. Tenemos que llamar a los que tienen la misma coherencia ideológica, y para eso tenemos que seguir ampliando”, subrayó Valdés, y agregó: “Podemos seguir sumando hasta el último día del último domingo de octubre”.
Martín Lousteau, por su parte, pidió acelerar la discusión: “Necesitamos esa amplitud adentro, no negociada después, porque cuando se negocia después de ganar el gobierno, al principio, cuando se tiene poder, todos vienen, pero cuando empiezan las dificultades, aquellos que no están dentro de la coalición dejan de poner el hombro, que es lo que pasó en 2015. Por eso necesitamos ampliar ahora”.
En la misma sintonía, se expresó Fabio Quetglas, diputado nacional de la UCR por la Provincia de Buenos Aires: “No nos enredemos en el chamuyo flaco o en el cambio cosmético. El radicalismo puede liderar la transformación que el siglo XXI exige. No seremos el país de amplias clases medias que soñamos, si no tenemos más empresas y nuevos sectores económicos, creando, empujando y desafiando el futuro”.
Y agregó: “Esta convención para nosotros es un ritual, pero también es una obligación discutir de cara a la sociedad de manera transparente todas nuestras heterogeneidades, nuestras ideas, nuestras trayectorias. En este caso, puesto al servicio de una contribución democrática como el Radicalismo siempre lo ha hecho”.
Más presión
En la previa de la Convención, Morales, Larreta y Valdés intentaron acorralar a Bullrich con un documento donde sostuvieron que el triunfo de Poggi en San Luis es “un ejemplo nítido de que la ampliación y la unidad de Juntos por el Cambio y la incorporación de dirigentes con una importante trayectoria política nos fortalece”.
Asimismo, sostuvieron que “gobernar esta Argentina requerirá una coalición nacional. Cuanto más ambiciosa sea la agenda de reformas, más músculo político y capacidad de gestión tendrá que tener. Por eso nuestro compromiso es seguir trabajando por la unidad y la ampliación de Juntos por el Cambio hasta el último minuto antes de asumir el gobierno”.
Además de Morales, Larreta y Valdés, adhirieron Elisa Carrió y Maximiliano Ferraro por la Coalición Cívica; Miguel Pichetto por el Peronismo Republicano; el recientemente incorporado José Luis Espert, de Avanza Libertad; el senador y precandidato a jefe de Gobierno porteño Martín Lousteau; la diputada del GEN Margarita Stolbizer; y Diego Santilli, también diputado y aspirante a gobernador bonaerense del larretismo.
La cumbre radical
En la Convención no se habló de candidaturas y, por ahora, siguen en carrera Morales y Manes. En medio de las versiones sobre fórmulas cruzadas con el PRO, Gastón Manes arengó a sus correligionarios a liderar la oferta electoral.
“Abandonemos la pasividad y el oportunismo: estamos para más. No somos el grupo de soporte de nadie; debemos ser la alternativa de poder en Argentina, así nos lo enseñaron nuestros líderes a lo largo de la historia”, enfatizó en uno de los pasajes más aplaudidos.
La UCR también aprobó los lineamientos de su programa de gobierno, trabajado por la Fundación Alem, que consta de 27 áreas y un total de 579 páginas. Entre otras cosas, el documento rechaza los “atajos exóticos” como la dolarización y la eliminación del Banco Central, y propone “un plan de estabilización para terminar con la inflación, la presión cambiaria y el cepo”.
De esa manera, quedó establecido de manera implícita que el único límite a la ampliación de Juntos por el Cambio tiene nombre y apellido: Javier Milei.