El Banco Nación (BNA) anunció que avanzará en la defensa de los derechos del Estado Nacional en el caso Vicentín, en relación con el fallo de la justicia que rechazó la propuesta de los accionistas y ordenó la reapertura del período de concurrencia (artículo 48 LQD), también conocido como “Cramdown” o salvataje.
En su condición de acreedor privilegiado, el BNA “velará en la etapa que se inicia para que se cumplan con los objetivos respecto de que la empresa continúe siendo una gran referente en el mercado local, para defender las fuentes de trabajo y la producción”, destacó la entidad en un comunicado difundido anoche.
El juez civil y comercial de las segunda nominación de la ciudad santafesina de Reconquista, Fabián Lorenzini, firmó ayer la resolución que rechaza la homologación del acuerdo presentado por Vicentin para salir del concurso, al tiempo que abre el período de salvataje.
El comunicado de la entidad señala que en sintonía con lo alegado por el BNA en sendas presentaciones, incluida la impugnación a la propuesta, el juez al resolver en su sentencia reconoció “la desigual distribución del esfuerzo entre los acreedores y la sociedad concursada que implicaba la propuesta en cuestión”, concluyendo en su fallo la necesidad de adoptar “mayor control y presencia tuitiva del Estado en aquellas empresas o sectores que se consideren estratégicos”.
“Ahora, con la apertura de esta nueva etapa procesal, resurge la posibilidad del Estado Nacional de lograr su objetivo en defensa de las y los argentinos, es decir, sostener la unidad productiva evitando el desguace y fundamentalmente su protección”, concluye el comunicado del BNA.
Vicentin, una de las mayores exportadoras agroindustriales de la Argentina, hasta que se declaró en default en diciembre de 2019, con una deuda de US$1.350 millones, emplea a una millar de personas en distintas plantas productivas radicadas en el Gran Rosario y en el centro de la provincia.