Triple femicidio: testigos aseguran que Lara conocía y había tenido citas con ciudadanos peruanos en Flores

La investigación sigue la pista “narco-peruana” para desentramar los hechos que terminaron en el triple crimen.

Triple femicidio: testigos aseguran que Lara conocía y había tenido citas con ciudadanos peruanos en Flores
Lara Gutiérrez habría tenido citas con ciudadanos peruanos en Flores

Se profundiza la investigación para dar con los responsables de la masacre de Florencio Varela, que terminó con la vida de Brenda, Lara y Morena. La Justicia se centra casi desde el día 1 en la pista “narco-peruana” y, mientras intentan dar con “Pequeño J” -señalado como el responsable- otros hechos que pueden arrojar nuevos datos salen a la luz.

Testigos consignaron a Infobae que la menor de las víctimas había tenido contacto y citas con peruanos en Flores, incluso se sospecha que hasta el mismo día de los hechos.

Según trascendió por el testimonio de conocidos de la joven, esta le había comentado a una amiga de La Tablada que un ciudadano peruano “la había invitado a comer”.

En esa oportunidad, Lara no habría ido sola, sino que la acompañó Morena Verdi, otra de las víctimas. El encuentro tuvo lugar en un local de comidas rápidas de Flores.

Los testimonios hablan de que en aquella ocasión no hubo ningún tipo de contacto físico entre las chicas y este hombre. No obstante sí les habría pagado o “regalado” 200 dólares. No sería el único obsequio: una semana antes del crimen el mismo hombre le entregó a la joven de 15 años un oso de peluche y un perfume.

La útima vez que Lara habló con este misterioso hombre -del que no surgieron datos precisos- habría sido el mismo viernes de la desaparición: se sospecha que la llamó para coordinar otro encuentro.

Otros encuentros

Además del vínculo con el hombre “del oso de peluche”, la Justicia reunió testimonios que ubican a Lara en Flores el 6 de septiembre, acompañada de otra joven -de identidad desconocida hasta ahora-. En esa oportunidad, se habría reunido con dos hombres peruanos en un bar-pool sobre la Avenida Rivadavia al 7100.

En cuanto a estas últimas personas, del entorno de Lara hubo quienes manifestaron que el mismo viernes del aberrante episodio también se encontró con ellos.

Esta sucesión de nuevos comentarios y datos suman a la causa la posibilidad de continuar atando cabos, en caso de que los hechos y las personas estén relacionadas.