La medida fue adoptada por la intendenta Rosario Romero, quien el 3 de enero derogó el Decreto N.º 1996, poniendo fin a la exigencia que obligaba a los ciudadanos a saldar multas de otras ciudades, como Buenos Aires, Córdoba y Misiones, para poder renovar su licencia.
Fundamentos de la decisión
La resolución se basa en diversos fallos de la Cámara en lo Contencioso Administrativo N.º 1 de Paraná, que consideró que el cobro compulsivo de multas de otras jurisdicciones vulneraba el derecho al debido proceso de los solicitantes de licencias de conducir.
Un trámite más ágil y accesible
Con esta modificación, los conductores solo deberán abonar las infracciones registradas en la ciudad de Paraná, las cuales podrán consultarse a través de la plataforma digital Mi Paraná. Además, el sistema de notificación de infracciones será más eficiente y accesible.
La medida busca simplificar el proceso de renovación de licencias y evitar costos adicionales para los vecinos. En los fundamentos de la resolución se destaca que el convenio con la Agencia Nacional de Seguridad Vial resultaba oneroso, ya que obligaba a consultar el CENAT y, en caso de registrar infracciones en otras provincias, a abonarlas como requisito para completar el trámite.