La bajante histórica que vive el Río Paraná desde hace unos meses parece tener un respiro tras la llegada de lluvias en las cuencas superiores y luego de la apertura de las compuertas de la represa Itaipú. Luego de llegar a la marca histórica de 14 centímetros frente a la costa de Paraná, en el día de ayer el río alcanzó 1.28 metros lo que es el nivel más alto en los últimos dos meses.
No obstante, el alivio sería momentaneo y la cuencia del Río Paraná en territorio argentino seguiría sufriendo la bajante al menos hasta fin de año. Según informó UNO, los pronósticos meteorológicos prevén la persistencia de días con lluvias acotadas o escasas, según el Instituto Nacional del Agua (INA) para gran parte del segundo semestre, por la llegada de la corriente de La Niña.
Desde el INA indicaron que "La futura evolución de los niveles en este tramo del río dependerá fuertemente de la distribución espacial y montos de las lluvias. La tendencia climática no permite esperar una recuperación significativa en los próximos tres meses".
