La tranquilidad que disfrutaba una familia que había decidido ir al balneario Albino Cotro se interrumpió debido a que Lara, la hija de 10 años de la pareja, recibió una fuerte descarga eléctrica, por la que tuvo que ser internada.
Esto ocurrió cerca de las 22:30 del miércoles, cuando la menor, que estaba jugando con sus primos, tocó una de las farolas y quedó pegada. Los otros niños empezaron a gritar y fue una de sus primas la que la tomó de la mano y logró sacarla.
A los pocos minutos, arribó una ambulancia del SIEN, y los médicos le dieron los primeros auxilios a la menor, que ahora está en un sanatorio privado. El abuelo de la menor, de nombre Alberto, confirmó que tiene alteraciones arteriales debido a que la electricidad no hizo descarga a tierra.
"No se toman los recaudos necesarios para controlar en lo más mínimo el mantenimiento. Las instalaciones dejan mucho que desear", comentó el hombre, que reveló que los médicos están controlando si la descarga afectó órganos o tejidos blandos, informó Rio Negro.