A comienzos de octubre se registró una invasión de roedores en la Cordillera patagónica y la situación se agravó en los últimos días. Desde el Parque Nacional Nahuel Huapi informaron que el paso a algunos de los principales lagos y balnearios ubicados al Suroeste de la provincia de Neuquén permanecerán cerrados durante el fin de semana largo para evitar que los turistas y visitantes entren en contacto con la plaga.
Tanto en la montaña como en los lagos, la presencia de las ratas es numerosa, e incluso cientos de ellos aparecen ahogados. Una posible razón sería que el evento está vinculado a la regulación natural de la población, aunque algunos especialistas indican que, "movidos por la sed después de su alimentación, los ratones se lanzan a los lagos y mueren". Otra posible explicación es que el crecimiento de esta especie esté asociado a la floración de la caña colihue.
En una entrevista con Clarín, Diego Canestracci, Intendente del Parque Nacional Nahuel Huapi, confirmó: "Estamos ante una etapa muy avanzada de la floración, por lo que ha disminuido el alimento. También se detectaron una menor cantidad de ejemplares preñados. Esto ocurre en el norte del parque".
Se estima que son 90 mil las hectáreas irradiadas y que el número de roedores supera en algunos casos el 1,5 millón por cada 1000 hectáreas. Una de las especies de esta invasión es el colilargo responsable de transmitir el hantavirus.