"Me puteó todo el primer tiempo a mí y sobre todo al árbitro Biffis", confesó Daniela Muñoz, una joven de 18 años que fue la jueza de línea del partido Unión Vecinal-Rivadavia sobre el entrenador visitante Omar Vielma.
El hecho sucedió el sábado por la tarde cuando la joven árbitro dirigió el partido de fútbol en el que se sintió no solo insultada sino también ofendida por haber recibido comentarios racistas.
"'Andá a lavar los platos, 'pendeja de mierda', 'no sabés nada", comentó Muñoz sobre que le dijo el agresivo entrenador. Y continuó: "Lo peor es que se sumaron su hija y 2 o 3 mujeres muy desubicadas. Cuando se sancionó un penal y fui a la línea de meta empezaron a escupir y a tirarme cosas", denuncia la asistente, en contraposición a la versión del entrenador.
Además de violencia de género, según cuenta Daniela, fue víctima de racismo debido a su color de piel. "Yo soy morocha y me decían 'india, volvete a tu país, negra de m...' No sé si lo saben, pero soy bien neuquina y con mucho orgullo", agregó la joven de 18 años que sueña con llegar lejos en el referato.
En su diálogo con Imneuquen, la joven también contó que al estar sola en la cancha se sintió sola e indefensa, "Duele y molesta, con lo que cuesta entrar a la cancha y hacer frente a todo, porque no tenés el respaldo de nadie. Hay pocos policías y no sabés que puede pasar. Estas cosas no ayudan para nada".
Ante estas injusticias, la joven contó que informó en el minuto 43 que vivió esta violencia y que las autoridades echaron al hombre de la cancha, Por lo que "se fue detrás del arco y le di poca importancia a sus agravios".
Por último la joven comentó que va a esperar una sanción ejemplar para Vielma. "Si la vez pasada a Emiliano Doglioli le dieron 16 por algo similar, ahora espero que sean igual o más severos", culminó.