Juan Pablo Montané, de 38 años, profesor de educación física y jugador de mayor edad de la Selección Argentina, se adjudicó invita el XIV Campeonato Sudamericano de Waterpolo, que se disputó del 22 al 28 de marzo en el natatorio de Parque Roca de la Ciudad de Buenos Aires.
El combinado argentino, denominado Los Yacarés, fue dirigido por Daniel Poggi y Gabriel Ramírez como asistente técnico y estuvo integrado por los arqueros Diego Malnero y Octavio Salas; los defensores, Ramiro Veich, Guido Martino y Octavio Antunes; los boyas Eduardo Bonomo y Tomas Echenique; y los perimetrales Iván Carabantes, Carlos Camnasio, Esteban Corsi, Guido Poggi, Juan Pablo Montané y Tomás Galimberti.
Camino hacia la final
En la primera fase, Argentina se impuso 36 a 1 a Paraguay; 27 a 1 a Chile; 28 a 1 a Uruguay; 12 a 9 a Colombia; 23 a 2 a Perú y 9 a 7 a Brasil. En semifinales le ganó nuevamente a Uruguay, esta vez por 18 a 1. La final fue un cerrado 11 a 9 con Brasil.
El deportista mendocino remarcó, en su llegada a la provincia, que “el precursor de esta disciplina en Mendoza fue mi padre Eugenio, también profesor de educación física, actualmente jubilado, junto a su hermano Leandro, un referente local de la natación, por lo que yo continué con la misma práctica deportiva”.
En este sentido, comentó que su debut en un seleccionado nacional “fue en 1999 en la Sub-20 y debuté en el 2002 en la categoría absoluta que vendría ser la mayor. A partir de allí, pasé por distintos campeonatos sudamericanos que se realizan cada dos años; Juegos Panamericanos, donde integré cinco procesos, desde 2003 a la actualidad y también mundiales de la categoría absoluta. Tengo la suerte de haber participado de varios procesos en la selección”.
“Significó mucho ganar el Sudamericano”
Juan Pablo Montané consideró que “significó mucho ganar el Campeonato Sudamericano en la Ciudad de Buenos Aires, fundamentalmente después de un año tan complejo por la pandemia, las complicaciones de los entrenamientos y la preparación, donde los jugadores tuvimos que afrontar muchos costos de viajes, incluso alojamientos y comida. Por suerte, hicimos un gran torneo y les ganamos a todos los rivales y al adversario, que ya es un clásico como Brasil, en la fase regular y también en la final. Argentina hacía muchos años que no le ganaba a Brasil en casa, creo que más de 60 años, por lo que fue un logro muy importante y significó mucho para todo el waterpolo argentino”.
En cuanto al Sudamericano, Montané comentó: “En categoría absoluta, este sería mi noveno campeonato de este tipo, que son torneos que se hacen cada dos años. El primero en el que participé fue en 2002, pero un año antes lo había hecho como juvenil, por lo que en total fue mi décimo sudamericano. Lo bueno es que a partir de 2010, nosotros hemos estado en forma consecutiva en todas las finales y yo tuve la suerte de ganar ahora mi quinto título, por lo que estoy muy contento de ser uno de los jugadores que salió campeón sudamericano cinco veces”.