El 30% de las fincas del Este de Mendoza están en estado de abandono. Este dato surge del relevamiento que realizaron los pilotos que llevaron adelante la campaña de fumigación aérea contra la Lobesia botrana, más conocida como "polilla de la vid", en la temporada 2017 /2018.
Este porcentaje sólo contempla aquellos cultivos que todavía podrían recuperarse, abandonados entre los 2 y los 4 años, y no incluyen los que ya se han muerto.
Estos datos, si bien oficiales, no están incorporados a las estadísticas que maneja el Instituto Nacional de Vitivinicultura, ya que "el productor no denuncia el abandono de la propiedad inmediatamente y muchas veces nunca lo hace", indicó Gabriela Lizana, de la Asociación de Productores del Oasis del Este de Mendoza (Aproem).
Los pilotos elevaron este informe debido a que era necesario establecer qué superficie se beneficiaba con la fumigación. Allí se detectó que el 30% de la superficie fumigada ya estaba abandonada, aunque era indispensable incluirla dentro de la campaña para combatir la plaga.
Pero este panorama, bien claro en la zona Este, también se repite en otras zonas de Mendoza, especialmente en el Sur.