Un oficial de la Comisaría Cuarta de la ciudad de Mendoza se dirigió hasta un domicilio ubicado en calle Santiago del Estéreo para controlar la consigna policial que la Justicia había dispuesto en el lugar. Al llegar constató que la agente policial ubicada en dicho domicilio estaba en estado de ebriedad mientras cumplía sus funciones en una consigna domiciliaria. El hecho ocurrió minutos después del mediodía de este jueves.
El oficial se encontró con su colega, la auxiliar Vanesa Jimena Moreno (41), en el interior de su vehículo y en un aparente estado de ebriedad. Fuentes policiales confiaron que además se mostró violenta con su par policial.
La mujer fue trasladada a la dependencia policial donde le realizaron un dosaje que confirmó que tenía 1,03 gramos de alcohol en sangre, es decir, más del doble de lo que se permite como límite para un conductor.
Es por esto que se notificó a la Oficina Fiscal 13, a la Inspección General de Seguridad (IGS) y se le retuvo su pistola 9 milímetros reglamentaria.