Hoy, comenzaron las excavaciones en el Instituto Próvolo. Tras la autorización judicial y luego de una semana de estudio del terreno con un georadar aportado por la Gendarmería Nacional, comenzaron a desenterrar algunos objetos que surgieron de las lectoras de la aparato.
La medida fue solicitada por la querella, luego de que una de las víctimas denunciara que las autoridades del establecimiento habían enterrado una caja en el predio. Incluso, otra versión hablaba sobre la supuesta muerte de un menor, quien habría sido enterrado en el instituto.
Las sospechas incluyen el presunto ocultamiento del cadáver de uno de los chicos puplios que habría fallecido tras caer del techo del colegio religioso hace algunos años y de fetos humanos que provendrían de los abortos que se practicaban a las niñas víctimas de los ultrajes.
La causa permanece con 15 imputados y tras la detención de la cocinera Noemí Paz (59), cinco de los acusados permanecen presos en distintas cárceles.
Estos son el cura Horacio Corbacho (56), el monaguillo Jorge Bordón (50), el jardinero Armando Gómez (46), el empleado del instituto José Luis Ojeda (41) -no se define aún si este es inimputable- y la cocinera Paz.