Murió Milena Yanzón, Reina Nacional de la Vendimia 1957

Vivía en Córdoba, tenía 82 años y luchó contra muchos problemas de salud. La Vendimia fue su adicción.

Murió Milena Yanzón, Reina Nacional de la Vendimia 1957
Milena Yanzón en una imagen tomada hace unos años\u002E

La Reina Nacional de la Vendimia, coronada en 1957, Milena Yanzón murió en Córdoba, provincia en donde vivió sus últimos años.

Milena tenía 82 años y no logró superar múltiples problemas de salud que la aquejaron durante los últimos tiempos, dijo a diario Uno su hija, Elizabeth Todman, vía telefónica. El deceso se produjo en la casa familiar, adonde cumplía un regimen de internación domiciliaria organizado para evitarle males mayores.

Yanzón fue la primera maestra en ser coronada Reina de la Vendimia y eso también la distinguió a través del tiempo.

Representó al departamento Las Heras y recibió los atributos vendimiales de manos de la alvearense Nelda Rotti, quien ejerció el reinado durante dos años seguidos (1955 y 1956) porque en 1956 no hubo fiesta como consecuencia de una crisis y la epidemia de polimielitis.

La bella mujer que fue electa Reina Nacional de la Vendimia en 1957
La bella mujer que fue electa Reina Nacional de la Vendimia en 1957

Elizabeth Todman es su única descendencia directa. Milena Yanzón también tuvo dos nietos. Había enviudado en 2013 y regresado al país procedente de Estados Unidos. Se radicó en la provincia mediterránea para estar cerca de sus hermanos.

A pesar de la lejanía, la Reina de 1957 nunca olvidó su experiencia vendimial y siempre se mostró orgullosa de haber representado a Las Heras y a Mendoza toda. Guardaba fotos y recortes de la época que con gran entusiasmo compartió con quienes quisieran evocar aquella época dorada.

"Le encantaba mirar la Vendimia por televisión. La Fiesta Nacional de la Vendimia y todos los festejos como el Carrusell y la Vía Blanca eran su adicción", cuenta la hija de la soberana nacional.

Cuando la eligieron, el espectáculo central, el número 21 desde que se puso en marcha por primera vez, aludió a la Gesta Sanmartiniana y a los ideales de paz y libertad.

Las crónicas de época dan cuenta de que se utilizaron pantallas gigantes para acercar las imágenes al gran público y  la notable actuación de los artistas mendocinos y del Teatro Colón de Buenos Aires.