La Justicia mendocina le negó la indemnización a una joven a la que dejaron encerrada en una plaza y se lastimó al saltar la reja para salir. Es más, ella deberá pagar ahora los honorarios de sus abogados y los costes del juicio.
En marzo del 2017, la joven tenía 25 años y fue a hacer ejercicio a la Plaza Uruguay, ubicada entre calle Paraguay y Ayacucho, de Ciudad en la Cuarta Sección. Cuando intentó salir, notó que el placero había puesto candado a la reja sin notar que ella estaba adentro y la había dejado encerrada.
Ella se asustó y decidió saltar la reja para salir. Al hacerlo se lastimó el cuarto dedo de su mano izquierda (ella es zurda). Le quedó la falange colgando. Tuvo que ser asistida por vecinos y luego en el hospital Central.
Durante los tres meses posteriores al hecho, la joven tuvo que hacer fisiokinesioterapia. Es más, al día de hoy presenta limitaciones funcionales que entorpecen sus tareas diarias, según su relato.
La víctima demandó a la Municipalidad de Ciudad por daños y perjuicios, reclamó en concepto de daño incapacitante $ 218.099, por gastos terapéuticos $ 5.000 y por daño moral, $ 109.500. Sin embargo, la Justicia consideró que ella se lastimó por su propia culpa y deberá ser ella quien afronte los gastos del juicio.
Las jueces María Luz Coussirat, Beatriz Moreau y Carla Zanichelli consideraron que "los daños que sufrió en su mano se debieron a su propia culpa pues, si bien el placero cerró la puerta sin advertir que aún quedaba gente dentro del predio, no fue esta falta de servicio la causa de los daños sino la propia actitud de la accionante, que decidió tomar el riesgo de trepar la reja para intentar salir del lugar".
Consideraron, además, que la zona es segura y que está iluminada, que la chica podría haberle pedido ayuda a algún vecino para salir o que podría haber llamado al 911.